Se unta la pierna de sal a que quede completamente cubierta; se pone en un trasto de cristal poniendo en el fondo una cama de sal, se mete al refrigerador por 10 días teniendo cuidado de cuando la sangre salga escurrirla y de que esté completamente cubierta de sal. A los diez días se saca del refrigerador, se lava perfectamente en agua fría y con una escobeta, de modo que suelte toda la sal, se pone en una cacerola con agua clara a que quede la pierna completamente cubierta por el agua, así se deja 24 horas, pasado este tiempo se vuelve a lavar la pierna con el chorro del agua, y se pone a cocer en agua sin sal a fuego muy manso. En un vaso se ponen 4 cucharadas de azúcar y tres cuartos de vaso de ron, se revuelve muy bien. Ya cocida la pierna se baña con el ron y azúcar por todos lados, se pone la pierna en una charola para horno y se hornea a 350 , se está bañando con el ron y agua en que se coció.
El cocimiento dura de 3 a 4 horas. Se toma en frío, con puré de pera o piña de lata, adornada con cerezas.
